Vida silvestre en México a la deriva por tráfico ilegal

Legislación Ambiental inconsistente

Las cifras por tráfico ilegal de vida silvestre alcanzan a nivel mundial valores de más de 20 mil millones de dólares, según cifras de la World Wild Fund (WWF, 2017) y del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA, 2016)

En México aún en 2018 existe una legislación ambiental ausente. A pesar de la existencia de diversas instancias dedicadas a la procuración de condiciones adecuadas para la supervivencia de especies de flora y fauna silvestres, la contraposición en la legislación mexicana, deriva en una falta de atención a los delitos relacionados con éstas sólo en faltas administrativas, salvo en los casos de aquellas especificadas en el Código Penal Federalcon respecto al Capítulo Segundo de la Biodiversidad, expuso Gabriel Arrechea González, presidente del Consejo Internacional de Recursos Naturales y Vida Silvestre (COIRENAT).

Para el caso de nuestro país tanto la Ley General de Vida Silvestre, la NORMA Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, la Ley General de Equilibrio Ecológico de Protección al Ambiente, son algunos de los instrumentos del marco legal para la protección de flora y fauna silvestres. Así como el certificado CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres) el cual regula el comercio internacional sobre especies de vida silvestre.

Arrechea González explicó para My Press el procedimiento de regulación a través de estas herramientas legales:"con respecto a las faltas de comercio y cacería furtiva, son consideradas como infracciones administrativas, las cuales ascienden desde 20 hasta 75000 Unidades Medida, equivalentes a días de salario mínimo, y en caso de reincidencia las sanciones pueden duplicarse"manifestó.

Con relación a la actividad del tráfico ilegal expuesto porNaciones Unidas ante el panorama mundial con respecto al tráfico de drogas, armas y de personas, México tiene un desafío mayor dadas las circunstancias que lo hacen un país megadiverso, es decir, la riqueza de su capital natural lo mantiene entre uno de los países con mayor comercio ilegal de especies.

De esta manera Arrecheacomentó"para todos los daños al medio ambiente que de alguna manera no pueden ser cuantificados, la ley únicamente valora al objeto y la sanción merecida, sin considerar el daño generado al entorno al momento de la sustracción, debido a elementos insuficientes en su determinación. Cuando eso cambie y puedan ser establecidos e incluirlos en la ley, entonces se podrá actuar de otra manera y tipificar los delitos contra el ambiente".

Normalmente la responsabilidad en el tráfico ilegal de plantas y animales corresponde en un 80% a quien las compra, sin embargo la ley prevé actuar también sobre quién lo vende. Entonces en un menor porcentaje se castiga al vendedor, a causa de su detección durante una inspección o por alguna denuncia.

Gabriel Arrechea destacó "los delitos deben ser investigaciones presentadas ante el Ministerio Público, dado que las Procuradurías Ambientales no cuentan con dichas atribuciones, de ahí los vacíos en la legislación ambiental porque no hay en el país una instancia especializada en juzgar delitos ambientales. Cuando suceda eso será mucho más expedita".

"Se requiere hacer de manera pronta una serie de cambios en la legislación ambiental sobre todo mientras el daño por tráfico ilegalsea cuantificado nada más en términos económicos, simplemente con pagar la multa, se quitan del problema, pero cuando hay unapena privativa de la libertad entonces la gente recapacita y frena estas actividades. Al tipificarlos en la ley como delitos sería la única manera de frenar, tal vez no de desaparecerlo porque mientras sigan ganando dinero, seguirán cometiendo este tipo de atrocidades", agregó el titular de COIRENAT.

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