Intimidad de la cancelación del juego de NFL en México

Aficionados sufren pérdidas por compra de boletos, vuelos, hoteles y souvenirs

Los aficionados a la NFL en México, no tendrán un Buen Fin tras darse a conocer la cancelación del Juego de México (Mexico Game) de la temporada regular de la NFL entre Los Ángeles Rams y Kansas City Chiefs, el tradicional Monday Night Football, a celebrarse el 19 de noviembre en el Estadio Azteca. El césped del Coloso de Santa Úrsula no pasó las exigentes pruebas de calidad y seguridad obligatorias para un partido oficial de fútbol americano.

My Press accedió a la intimidad del evento, con una fuente cercana al montaje del juego de la NFL en México, y reveló que desde el jueves 8 de noviembre se comenzó con el acondicionamiento del Estadio Azteca para la gala de americano. El martes 13, "comisionados de la NLF citaron a todo el personal a junta urgente, para deliberar si era viable o no llevarse a cabo el partido en la deteriorada cancha del Azteca. A las 15:00 horas, se procedió a cancelar el Juego de México por el gran porcentaje de probabilidades de los jugadores sufrir una lesión; un riesgo", dijo.

Pérdidas de la afición van desde los cargos por compra de boletos, prendas oficiales del juego, boletos de avión y hospedaje. Fue un año de espera para volver a tener la oportunidad de ver un duelo de la NFL en la Ciudad de México, con la sorpresa de haber coincidido con ser el juego más atractivo de la temporada; ya que ambos equipos, según expertos, son el Super Bowl LIII, adelantado.

Una de las voces autorizadas de NFL, citó lo que sería la pérdida de la derrama económica para Ciudad de México.

Desde el arribo del personal técnico a la capital mexicana, también llegó la vestimenta del estadio, equipo para vestidores y marcar el césped, publicidad oficial y de patrocinadores del inmueble. Al momento de la cancelación del juego de la NFL, la vestimenta del estadio se encontraba al 60 por ciento y el montaje general, en 40 por ciento.

En total, informó la fuente, 210 personas se encontraban en las labores de preparación del Mexico Game del 19 de noviembre en CDMX. 150 trabajadores provenientes de varias ciudades de México y 60 personas de Estados Unidos, miembros del equipo de la NFL, encargados de cancha, adaptación del estadio, interiores, exteriores y seguridad.

Tras la cancelación Juego de México (Mexico Game)entre Los Ángeles Rams y Kansas City Chiefs, los aficionados pierden el dinero pagado por los cargos de los boletoscomprados en línea con el sistema 'TicketMaster'; la empresa solo reembolsa el costo neto de la entrada, incluso, a quienes adquirieron el pase en reventa; mismos que pagaron hasta cinco veces más del costo regular, los artículos promocionales con el logo oficial del partido, los boletos de avión, para quienes viajarían justo para asistir al partido de la temporada regular y el pago adelantado del alojamiento por Airbnb y hoteles en la zona, estos últimos, según información recaudada por My Press, elevaron al triple el costo frecuente por habitación.

"Estamos verificando información con organizadores del evento. Los invitamos a seguir al pendiente de nuestras redes sociales. Publicaremos un comunicado oficial con todos los detalles", publicó TicketMaster México en Twitter, relativo a la devolución del dinero recaudado. Trascendió que "el tiempo estimado de reintegro es de 7 días si fue con tarjeta bancaria, y en efectivo (por compra en taquilla), de inmediato, aunque ambas modalidades tendrían una cita previa".

Rams y Chiefs jugarán el Monday Night Football en el Memorial Coliseum de Los Ángeles, California, en la fecha original y los boletos se venden desde la 1 de la tarde (hora de Los Ángeles) del 14 de noviembre.

Mientras tanto en México, el Estadio Azteca se pronunció por medio de comunicado oficial, lamentando el deterioro del césped debido a la temporada prolongada de lluvias en CDMX, conciertos y otros eventos previamente agendados. La intimidad de las pérdidas por cancelación de juego de NFL en México, golpean la economía de los aficionados del fútbol americano y cientos de familias dedicadas a la fabricación y, posterior venta de "souvenirs"del Juego de México,además de la comida, a las afueras del estadio.

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