Graduados prefieren mejor ambiente laboral por sobre el salario

Ciudad de México, 20-07-2016 |

Para los recién graduados es importante un buen ambiente laboral

Los recién graduados entran a la tendencia que emerge en la actualidad. Aceptar un trabajo primero por el ambiente positivo que éste tenga, antes que pensar en engrosar su cuenta bancaria. Los jóvenes de las nuevas generaciones son atraídos por un excelente ambiente laboral, donde la competencia sea de manera natural y respetuosa, que crezcan con rapidez y valoren sus capacidades.

Entidades enfocadas en la consultoría de talento, coinciden que por cada 10 graduados, al menos siete optarían por aceptar su primer empleo en una compañía que les proporcione crecimiento personal hilado con el buen trato y buenas relaciones humanas. Incluso, ponderan dichas cualidades de una empresa, por encima del salario.

Un patrón recurrente en las compañías que ganan el premio "Las mejores empresas para trabajar" (Great Place to Work®), es la calidad humana en las relaciones laborales. Integrarse y trabajar en equipo, sin importar cuánto crezca la cuenta bancaria. Es por ello que los graduados buscan estar cómodos desde el inicio de la jornada, hasta cumplir el horario de toda la semana.

"Estamos en una era donde las iniciativas creativas del talento joven, deben estar presentes en las metas que se fijan las compañías.

"No se trata de ofrecer grandes sueldos; la apuesta es albergar sangre nueva que busca ser parte de empresas socialmente responsables que incentiven el crecimiento, ante todo, personal", manifestó Venus Buchán, gerente de talento de la Consultora especializada en head hunting 3 Hunters.

Desde un buen reclutador hasta un buen jefe. En los procesos de captación de talento, existe una cifra superior del 90 por ciento, donde la juventud se siente atraída por la realización personal y profesional. La tendencia marca que si el líder de una empresa carece de buen genio y calidad humana, el recién graduado no aceptaría la vacante.

La era digital tiene relación con la llamada generación "Millennials". Aquéllos nacidos entre 1984 y 1992 (que en 2016 tienen entre 24 y 32 años). Jóvenes que prefieren renunciar a una empresa donde el jefe no es carismático y cordial, y que antes de dos años, salen de una compañía que no propone retos y crecimiento profesional. Y no, no es cuestión de dinero.

El aspecto económico no tendría la misma importancia que sentirse realizado en un nuevo empleo. Los recién graduados podrían estar enviando un mensaje claro para la industria: invertir en el crecimiento humano y aprovechar el talento de un nuevo ADN que traería consigo innnovación, talento y armonía laboral.