Investigadores de la surcoreana Universidad Nacional de Kangwon realizaron un estudio sobre el abusodejuegosonliney, de acuerdo con sus resultados, el uso excesivo de juegos en Internetse asocia con una alteración de la conectividad funcional frontoestriatal durante el procesamiento de retroalimentación de recompensa. El sistema de recompensa del cerebro es el responsable de que las personas sean proclives a repetir conductas y estímulos que las hicieron experimentar placer.
El trastorno por juego en Internet se asocia con un procesamiento de recompensa anormal en el circuito cerebral de recompensa, el cual se sabe que interactúa con otras regiones del cerebro durante el aprendizaje por retroalimentación. Individuos con uso excesivo de juegos de Internet (internet game overuse ,IGO) exhiben comportamiento y actividad neuronal alterados ante recompensas no monetarias, pero no ante recompensas monetarias.
Los datos obtenidos por Jinhee Kim yEunjoo Kang fueron resultado de un análisis de IGO en la conectividad funcional de lared de recompensas. Los datos de imagen por resonancia magnética funcional se obtuvieron durante una tarea de aprendizaje de asociación de estímulo-respuesta monitoreada en 18 hombres jóvenes con IGO y 20 sujetos de control de la misma edad; durante las pruebas se dieron recompensas monetarias o no monetarias como retroalimentación positiva para una respuesta correcta.
Para la recompensa monetaria, el grupo IGO exhibió una conectividad funcional más fuerte dentro de las regiones del cerebro involucradas en la prominencia motivacional, mientras que mostró una conectividad funcional reducida en las áreas del cerebro ampliamente distribuidas involucradas en el aprendizaje o la atención.
Tales diferencias en la conectividad funcional de las redes de recompensa, junto con las deficiencias conductuales relacionadas con el aprendizaje de recompensa, sugieren que el trastorno de los juegos de Internet se asocia con el aumento de la importancia de los incentivos o el "deseo" de los trastornos de la adicción, y puede servir como los mecanismos neurobiológicos subyacentes a la alteración de la conducta dirigida a objetivos.
Además, advierten, la conectividad funcional más débil entre el circuito de recompensa y otras regiones del cerebro relacionadas con el control cognitivo o el aprendizaje sugiere que puede haber problemas adicionales de aprendizaje.
"A pesar de las diferencias en la conectividad funcional para procesar la recompensa monetaria, la mayor prominencia motivacional de esta retroalimentación aparentemente ocultó cualquier impedimento de aprendizaje, posiblemente debido a una estrategia compensatoria que no se investigó en este paradigma, como la memoria de trabajo", precisan Kim y Kang en su publicación sobre cómo el abuso de juegos onlineestá asociado con alteraciones cerebrales.